Si te sientes deprimido/a o ansioso/a puedes ir a terapia para aprender a identificar y gestionar tus emociones de manera saludable.

Si tienes problemas para controlar la ira puedes aprender a expresar tu ira de manera constructiva.

Si tienes problemas para concentrarte o tomar decisiones puedes aprender a mejorar tus habilidades cognitivas. Además, podemos explorar la posibilidad de que siempre hayas “pensado” de manera diferente, es decir , que tengas un cerebro neurodivergente y ayudarte a entender y manejar esa realidad.

Si estás pasando por una ruptura de pareja o un cambio importante en tu vida puedes aprender a afrontar el cambio y a construir una nueva vida.

Si quieres mejorar las relaciones puedes aprender a comunicarte mejor y a resolver los conflictos de manera constructiva.

Y en general para lograr un equilibrio en tu vida, para sentirte bien contigo mismo y a partir de ahí sentirte bien en tu vida laboral y en tus relaciones.

¿Cómo funciona la terapia psicológica?

La terapia psicológica es un proceso individualizado que se adapta a las necesidades específicas de la persona. El terapeuta trabajará con la persona para establecer los objetivos de la terapia y desarrollar un plan de tratamiento.

Las sesiones de terapia suelen durar entre 50 y 60 minutos y se llevan a cabo con regularidad, generalmente una o dos veces a la semana. Durante las sesiones, el terapeuta y la persona hablarán sobre los problemas de la persona, explorarán sus sentimientos y buscarán soluciones.

Si estás pensando en ir a terapia, es importante que encuentres un terapeuta que sea adecuado para ti.